En algún momento, probablemente has escuchado hablar sobre los derechos humanos. Ya sea en las noticias, en alguna clase, en una película o documental, este término puede haberte aparecido. Pero, ¿realmente sabes qué son estos derechos y para qué sirven? Son fundamentales para la protección de cualquier persona.
Así, desde su surgimiento, los derechos humanos se han vuelto vitales y cada vez más evidentes para garantizar la libertad y la justicia para todos, especialmente en momentos de conflictos y violencia. México defiende los derechos humanos en su legislación, teniendo una historia marcada por luchas por la libertad, la igualdad y la conquista de derechos.
Por eso, en este texto de Politize!, vamos a entender el origen de los derechos humanos en el país, lo que representan, las principales leyes que los rigen, su relevancia para la sociedad y mucho más. ¡Así que vamos allá!
¿Qué son los derechos humanos?
Como ser humano, al nacer, simplemente por existir, hay un conjunto de derechos que te pertenecen y que deben ser garantizados. Como el derecho a la vida, por ejemplo. Interesante, ¿verdad? Los derechos humanos son exactamente eso, derechos inherentes a la condición de ser humano.
De esta manera, los derechos humanos son un conjunto de principios y normas que buscan proteger la dignidad de cualquier persona, debiendo ser universales. Así, independientemente de tu nacionalidad, raza, género, orientación sexual, religión o postura política, estos derechos deben ser garantizados para todos.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los derechos humanos son “garantías jurídicas universales que protegen a individuos y grupos contra acciones u omisiones de los gobiernos que atenten contra la dignidad humana“.
Algunos ejemplos que abarcan los derechos humanos son el derecho a la vida, la libertad, la seguridad, el trabajo, la salud, la educación, entre otros. El principal objetivo de los derechos humanos es garantizar que todas las personas tengan condiciones mínimas para llevar una vida digna.
Esto significa que el principio de la dignidad humana está defendido por estos derechos, buscando crear un entorno en el que todos puedan desarrollar sus capacidades sin discriminación, opresión o violencia. Por eso, los derechos humanos tienen la característica de ser universales, trayendo consigo los fundamentos de la equidad.
Pero no siempre han existido. De hecho, la conquista de los derechos humanos es reciente, habiéndose logrado hace menos de 100 años. Vamos a entender mejor cómo sucedió esto a continuación.
Historia y origen de los derechos humanos
Aunque hoy el término derechos humanos es bien conocido y los tenemos como derechos garantizados, es importante destacar que no siempre fue así. Los derechos humanos son garantías históricas que han cambiado a lo largo del tiempo, adaptándose a las necesidades de cada momento.
De esta manera, es posible decir que los principios que fundamentan los derechos humanos surgieron hace siglos, apareciendo en diversos momentos de la historia. El primer documento en el que aparecen estos principios fue el llamado Cilindro de Ciro, en el año 539 a.C.
Este documento marcó la liberación del pueblo hebreo de Babilonia, además de haber permitido la libertad religiosa y haber establecido la igualdad racial en la región de Persia (actual Irán).
Sin embargo, los principales avances en la garantía de estos derechos ocurrieron en la Edad Moderna y en la Edad Contemporánea. Dos ejemplos son la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, en 1776, y la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, con la Revolución Francesa en 1789.
El proceso de independencia de los EE.UU. destacó la conquista de los derechos individuales y sirvió de referencia para otros pueblos y países colonizados en América. En su declaración, se estableció que “todos los hombres son creados iguales, dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables”.
Así, en este contexto, estas ideas también influenciaron otros movimientos en el mundo. Un ejemplo fue la Revolución Francesa, en 1789. El evento es reconocido como un avance para los derechos humanos por el histórico documento aprobado como resultado, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.
El documento expresaba que “los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derechos“. De esta forma, esta declaración también representó un gran avance en términos de la conquista de derechos. Sin embargo, estos derechos estaban destinados solo al pueblo francés.
Fue solo en la segunda mitad del siglo XX, con las grandes destrucciones y violaciones de los derechos individuales causadas por la Segunda Guerra Mundial, que los derechos humanos se consolidaron en el mundo.
Las atrocidades vividas durante la guerra tuvieron un impacto en la comunidad internacional y, con el fin del conflicto, se fundó en 1945 la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El principal objetivo de la organización era establecer la paz mundial y la seguridad internacional, sirviendo como un mecanismo para que las naciones resolvieran sus conflictos por medios pacíficos.
Con este espíritu de evitar que las violaciones y las violencias extremas ocurrieran de nuevo, la ONU formó una comisión liderada por Eleanor Roosevelt y elaboró la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en 1948. Así, el documento establece, en su artículo 1º, que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos“.
El documento está compuesto por 30 artículos que tratan sobre los derechos que todo ser humano debe tener, como la libertad, el esparcimiento, la educación, la cultura, el bienestar, la vestimenta, la alimentación, el trabajo, la igualdad, entre otros. Y por tener carácter universal, toda persona en el mundo pasa a estar protegida simplemente por el hecho de existir como ser humano.
El surgimiento de los derechos humanos en México
Los derechos humanos en México son el resultado de diferentes luchas y procesos políticos que reclamaban derechos y mejores condiciones de vida para los mexicanos. Posteriormente, estas reivindicaciones fueron conquistadas y consagradas constitucionalmente en el país.
De esta manera, la historia de los derechos humanos en el país se remonta al siglo XIX, después de la independencia del país, con el establecimiento de la Constitución de 1857, que instituyó una sección llamada “De los Derechos del Hombre”, integrando protecciones y garantías.
Pero estos derechos adquirieron mayor relevancia a partir de la Revolución Mexicana, que resultó en la promulgación de la Constitución de 1917, vigente hasta hoy. Esta constitución incorporó diversos derechos sociales, incluyendo el derecho a la educación, al trabajo y a la tierra.
Así, a lo largo del siglo XX, con la lucha de los movimientos sociales y el fortalecimiento de la democracia en el país, México pasó a incorporar en su legislación interna los tratados internacionales de derechos humanos, como la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
En consecuencia, en 1990 se creó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), como un organismo cuyo objetivo es proteger y promover los derechos humanos en México. Entre sus principales funciones está recibir quejas y denuncias de violaciones de derechos humanos, investigar sus causas y formular recomendaciones a las autoridades competentes.
Las leyes de protección de los derechos humanos en el país
México adopta en su legislación el reconocimiento y la protección de los derechos humanos, tanto a través de legislaciones internas como en la adopción de tratados internacionales.
Como se mencionó anteriormente, el principal instrumento de garantía de los derechos humanos en el país es la Constitución de 1917, que ha pasado por diversas reformas y modificaciones desde su promulgación y reconoce los derechos sociales, económicos y políticos.
Así, en el año 2011 fue aprobado el Decreto de reforma constitucional en derechos humanos, modificando y agregando disposiciones de protección a estos derechos en el documento constitucional mexicano. Una de las modificaciones fue el cambio en el título del Capítulo 1, que pasó a denominarse “De los Derechos Humanos y sus Garantías”.
De esta manera, la Constitución prevé todo el aparato legal de defensa de estos derechos y de las garantías fundamentales para el pueblo mexicano, reconociendo que el Estado debe promover, respetar y proteger los derechos humanos con base en el principio de la universalidad.
Otra ley de protección a los derechos humanos en el país es la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Ella establece que la Comisión posee autonomía y tiene el deber de defender y promover los derechos humanos en todo el territorio nacional.
Así, la Comisión tiene la autoridad para recibir denuncias de violaciones de derechos humanos, investigar estas violaciones, formular recomendaciones públicas, proponer cambios legislativos y administrativos a las autoridades, decidir en última instancia sobre omisiones e inconformidades, entre otras.
Además, México es signatario de varios tratados internacionales sobre derechos humanos, además de la Declaración Universal. Por ejemplo, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966), el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1966) y la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial (1966).
Estas legislaciones y tratados representan el compromiso formal de México con la protección de los derechos humanos. Con ello, se aseguran los derechos civiles, políticos, económicos y sociales, en la búsqueda de la igualdad y la no discriminación en la sociedad mexicana.
Pero la implementación efectiva de estas normas no siempre es ideal. Esto porque muchas veces se enfrenta a obstáculos estructurales, como la violencia, el prejuicio y la desigualdad social.
Desafíos y principales violaciones de derechos humanos en México
A pesar del aparato legislativo, jurídico y administrativo del país, la protección de los derechos humanos enfrenta obstáculos y aún no es plena. Las violaciones a estos derechos ocurren por diversos motivos, evidenciando que hay desafíos que superar. El irrespeto a los derechos humanos es un problema que genera inseguridad en la sociedad, afectando importantes aspectos como la libertad, la dignidad y la justicia.
Según el informe de 2016 del Consejo Interamericano de Derechos Humanos, los principales factores que perjudican la garantía de los derechos humanos en México son la pobreza y la exclusión social, el crimen organizado, el tráfico, el uso de la fuerza por actores estatales y la impunidad.
En consecuencia, una de las violaciones más graves que se enfrenta es la desaparición forzada de personas, un fenómeno que ha aumentado en el país en los últimos tiempos. Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, en el año 2024 hay 116,386 personas desaparecidas, siendo la mayoría de sexo masculino.
Otro desafío tiene que ver con la violencia contra los periodistas. México es considerado como uno de los países más peligrosos del mundo para los periodistas. En este año 2024, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU emitió recomendaciones alertando sobre el asesinato de periodistas en el país.
Así, a pesar de que la libertad de prensa está garantizada por la Constitución de 1917, este derecho está en constante riesgo debido al ambiente violento en el que se encuentra el país. Además, el Consejo de la ONU también expone otras violaciones como la violencia de género y la crisis migratoria.
Como resultado, la protección de los derechos humanos se vuelve vulnerable, incluso con la legislación nacional y la actuación de organizaciones internacionales.
El papel de la sociedad civil en la protección de los derechos humanos
La sociedad civil mexicana tiene un papel muy importante y ha sido una fuerza vital en la promoción y protección de los derechos humanos. Organizaciones no gubernamentales (ONGs) y colectivos independientes monitorean, documentan y denuncian abusos, además de ofrecer apoyo legal y emocional a las víctimas de violaciones.
Estos movimientos desempeñan un trabajo fundamental en la concientización sobre los problemas de derechos humanos que enfrenta el país. Y es necesario seguir enfrentando estos problemas. Pues a pesar de la estructura legal e institucional de protección de los derechos humanos, la realidad está marcada por violaciones.
Sin embargo, no son desafíos simples de superar. La violencia, la desaparición forzada y las amenazas contra la libertad de expresión y de prensa son cuestiones delicadas que exigen un esfuerzo conjunto del Estado, de las autoridades y también de la sociedad civil.
Por eso, el activismo en la promoción de los derechos humanos es importante para el fortalecimiento de la democracia y para que todos puedan vivir de manera digna. Solo a través de un compromiso colectivo será posible garantizar que los derechos humanos sean plenamente respetados en el país.
Referencias
Comisión Nacional de los Derechos Humanos – Funciones
Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos
Decreto de reforma constitucional, 2011.
Constitución Política de los Estados Mexicanos
Politize! – O que são direitos humanos?
Politize! – História dos direitos humanos
El País – La ONU condena la violación a los derechos humanos en México
Comisión Interamericana de Derechos Humanos – Violencia, inseguridad y desapariciones en México
Amnistía Internacional – Desapariciones forzadas: Quién sabe dónde en México
PARRA, Rosa I. Derechos Humanos en México: Entre la Modernidad, Posmodernidad y Ultramodernidad. Revista de Ciencias Sociales y Humanidades, nº 57, 2020.
